La semana pasada @AlejanVM preguntaba acerca de las eSIM. Están apareciendo tímidamente en el mercado español, y parece que suene un poco a maniobra de marketing ¿no?
¿Qué es una eSIM? ¿Qué diferencias hay con la tarjeta SIM tradicional?
Lo aprendemos en un hilo🧵
ATENCIÓN: En este hilo no vas a encontrar farragosas explicaciones técnicas y, de hecho, caeré en imprecisiones en muchas ocasiones. De lo que se trata es que todo el mundo comprenda cómo funciona y porqué es importante, independientemente de su nivel de conocimiento.
Todos sabemos ya desde hace tiempo que para que un teléfono móvil funcione, necesita de una tarjeta llamada SIM
Resumiendo mucho, una tarjeta SIM es un soporte necesario que almacena ciertos datos de suscripción a una red de telefonía concreta, con los que conectarse a ésta
Históricamente, una tarjeta SIM ha tenido muchos factores de forma.
Los mas veteranos de por aquí recordarán que, por ejemplo, el Motorola StarTAC, que marcó un cambio de tendencia en diseño, usaba una tarjeta de tamaño completo como SIM.
Si, como una tarjeta de crédito.
Con el paso de los años, y por necesidades de diseño e ingeniería, las tarjetas SIM fueron deshaciéndose de todo el plástico sobrante, quedándose prácticamente en el "chip".
Incluso aparecieron adaptadores de un tamaño a otro durante un tiempo.
Y entonces apareció la eSIM
En lo que parece ser la evolución natural de esta tecnología, la eSIM no es sino un un chip que se encuentra dentro del teléfono, cuya función es exactamente la misma que la de la SIM clásica.
La GRAN diferencia es la cantidad de ventajas que aporta, no solo para el usuario
Para empezar, tener dentro del móvil una eSIM implica no depender de un elemento físico externo para conectarlo a una red de telefonía.
Esto evita, de entrada, un montón de posibles fallos provocados por un mal contacto o deterioro de las tarjetas SIM, porque va soldado.
Una tarjeta eSIM es muy pequeña. Lo que deja más espacio en el móvil para añadir mejoras de los componentes que ya tiene, o para añadir características mas avanzadas
Este tamaño reducido hace que otros dispositivos puedan usar una conexión celular, como un Smart Watch
Pero sin duda el caballo de batalla de la eSIM es la facilidad para cambiar de compañía, que por si misma ofrece: ya no hay que cambiar una tarjeta.
Con una eSIM puedes cambiar de compañía simplemente solicitándolo. Desde tu teléfono.
Entonces ¿porqué no está extendido?
Para explicar uno de los posibles motivos, nos vamos a remontar a 1985 y la invención de los SMS.
En aquel entonces, el ingeniero finés Matti Makkonen junto con dos amigos en una pizzería de Copenhague, fantasearon con un sistema de mensajería basado en caracteres.
Concebido como un sistema para avisar al usuario de, por ejemplo, llamadas perdidas o mensajes de buzón de voz, nunca nadie pensó que se usaría para enviar mensajes personales de un usuario a otro.
Es decir el SMS era un sistema unidireccional entre la compañía y el cliente
Pero fue en 1992 cuando Neil Papworth envió desde su ordenador personal el primer SMS de la historia a su director Richard Jarvis, felicitándole la Navidad.
"Merry_Christmas" fue concretamente el mensaje.
Y esto fue el pistoletazo de salida para comercializar el SMS.
Así es como se convirtió una característica de la red en un negocio boyante, con unos márgenes de beneficio brutales y un coste para el usuario final completamente desorbitado.
Y entonces ¿qué tiene que ver esto con la eSIM? Pues que nos encontramos ante la misma práctica
La eSIM es una evolución natural de la tecnología: en lugar de depender de una tarjeta externa, hagamos que un chip del propio teléfono pueda ser escrito y leído por la red de telefonía y, como hemos dicho antes, eliminamos problemas mecánicos.
¿Y el problema?
El problema es el de siempre: la tarjeta SIM es un negocio. Ya no por su fabricación sino por su comercialización.
Una tarjeta SIM es una dependencia física con una compañía, lo que hace que no puedas tener servicio si no tienes ese "trocito de plástico" de la compañía.
La eSIM viene a terminar con todo esto de un plumazo.
La dependencia directa ya no la maneja la compañía sino tú, y eso es peligroso para el negocio.
Por este motivo, si has tenido que solicitar una eSIM, quizá habrás tenido que ir físicamente a un establecimiento.
¿Es necesario? No, pero es una manera que tienen las compañías de seguir haciéndote depender de ellos de alguna manera.
Ésta práctica junto con la de pagar por el cambio de SIM física a eSIM o una "copia" de la misma, son habituales pero solo tienen un sentido comercial.
La eSIM es una hoja en blanco que da a los usuarios la capacidad de decidir con qué operadora quieren funcionar. Al instante.
O incluso operadoras, en plural, porque una eSIM puede contener varios números de teléfono.
Pero contraviene las reglas básicas del negocio de la telefonía móvil tal y como las conocemos.
Y la resistencia al cambio es brutal. Se trata de un cambio de paradigma, y España es uno de los países con las telecomunicaciones mas caras en la UE
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Igual que con el número de "Gigas", o esos routers soberanamente malos que ponen en casa, estas prácticas se ceban con el poco nivel de conocimiento tecnológico de la población.
Por eso debemos conocer cómo funciona la tecnología cotidiana y denunciar prácticas poco éticas
Pero bueno, el resumen es que una eSIM es funcionalmente lo mismo que una SIM: contiene los datos para poder enganchar con una red de telefonía.
Todas las trabas para su adopción no tienen fundamento tecnológico sino comercial, y eso no es bueno para el consumidor.
Nos encontramos ante otro caso de convertir una tecnología preexistente y desarrollada por otros, en un negocio de las operadoras que inpunemente lo explotan a precios desorbitados, como ya hicieron con el SMS
Lo importante es saber porqué ocurre esto y tratar de evitarlo
Éste es un tema amplísimo, del que pueden salir decenas de conversaciones diferentes.
Solo hemos rascado la superficie.
Si te animas, te invito a seguir la conversación en mi canal de Telegram
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