LOS INDEPENDENTISTAS CATALANES.
Es de lo que se ha hablado fugazmente hoy en el Pleno del Ayuntamiento de Santander. ¿Qué se debatía? Algo que nada tiene que ver: la mejora de la atención a la ciudadanía por los canales digitales.
Y denota lo difícil que resulta aparcar la ideología cuando se abordan asuntos técnicos, aburridos quizá, pero que tienen un impacto más directo en la ciudadanía que las seculares tensiones que tan a menudo distraen el debate público.
Aquí va una idea: competencia entre las Administraciones de los distintos territorios.
Si los independentistas catalanes quieren marcar distancias con los conservadores madrileños, que demuestren que pueden prestar mejores servicios públicos que ellos:
— Menores esperas en la sanidad pública
— Mejores portales de transparencia
— Trámites digitales más eficaces
Cantabria está mucho más atrás que Cataluña en transparencia de la contratación pública y servicios públicos digitales. Me gustaría que esto ofendiese tanto al Gobierno de Cantabria como el pacto para la financiación singular catalana.
Muchos estamos ya aburridos de los «zasca» y los insultos desde la tribuna de oradores. La España que bosteza. ¡Defiende tus ideas con hechos además de con palabras!
Quisiera ver una competencia feroz entre la Comunidad de Madrid y el País Vasco por ver quién reduce más las listas de espera a quirófano, quién paga antes a sus proveedores o —entre ayuntamientos— quién resuelve más rápido las licencias de obra.
Una Administración pública estajanovista.
Quizá solo así pudiéramos, como país, sacar algo positivo de nuestra secular pelea ibérica.